21 junio 2008

AZNAD & DANZA



Las personas con discapacidad con demasiada frecuencia deben salvar barreras de percepción o de comprensión, de manera que muchas veces se ven excluidas de actividades culturales como el teatro, la danza y la música, y ello por poseer una discapacidad sensorial, auditiva, visual, física o intelectual.

Así que hoy las personas con distintas discapacidades, han decidido proponer ellas mismas rampas para la expresión de sus capacidades artístico - creativas, de forma que sirvan de instrumentos vertebradores para la integración, participación y enriquecimiento personal compartido.

AzNad danza es un ejemplo de afrontación de la discapacidad, pero también de aportación artística desde estéticas diferenciadoras enormemente interesantes. El significado del nombre del grupo es un palíndromo que leído al reves es: DANZA.


Ellas/os no se ponen barreras . ¿Por qué hacerlo nosotros?


19 junio 2008

Teatro desde la oscuridad



Quizás el título sea poco acertado ya que el grupo de teatro Oroimenak y la coral Alaia, ambas agrupaciones artísticas de la ONCE nos demostraron sobre el escenario del Antzoki Zaharra, que ellos/as no habitan en abismos de oscuridad, sino todo lo contrario, acostumbran a desbrozar caminos que les conduzcan al encuentro con espacios de claridad.

Oroimenak representó la obra de teatro en clave cómico costumbrista "Los bailes de Txomin enea" escrita y dirigida por Txema Lángara.




José es ciego e interpreta el papel de Peio, un tertuliano socarrón inquilino en la sidrería Txomin enea. A José su ceguera no le impide hacer bien su papel. Con voz profunda, entonada, el es el primero en aparecer en escena nada más levantarse el telón.

Benito nació ciego - pero yo diría que también actor - un actor camaleónico, de memoria prodigiosa. Se conoce el texto de la obra entera. Benito deja su bastón entre bastidores, no lo necesita, se mueve seguro por el escenario – y como el me dice - ¡ es que a mis personajes (guardia y motorista) el bastón les entorpece!
Benito es un superviviente. No hay actor que se precie de serlo que no haya estampado sus huesos desde el escenario en caída libre contra el foso de cualquier teatro – y Benito no iba a ser menos – representaban a Shakespeare en la sala Imanol Larzabal, y como es habitual los actores y actrices invidentes tienen que familiarizarse con el espacio, medirlo antes de comenzar la función. Pues bien, a Benito su ceguera no le intimida para escrutar cualquier recóndito rincón de la escena, de tal suerte que dio algunos pasos de más y terminó cayendo al foso – el susto resulta inenarrable- ¿estás bien Benito? - ¡ahora si! Ya estoy listo para la función.

Nora tiene una deficiencia visual, deambula inquieta entre cajas, sólo se calma cuando está actuando. El teatro parece ser su bálsamo. Nora se mete en el pellejo de una lugareña.



Ana interpreta el papel de señora cursi – ¡vaya lo que hoy conocemos como pija ! – y lo borda, tiene dicción, gestualidad y ritmo. Sólo al terminar la función, supe que Ana es ciega. Es difícil apreciarlo porque despista su naturalidad fuera y dentro de escena, porque ante cualquier situación no extravía la mirada.

Siempre me pareció que los ojos inermes de un ciego eran inescrutables, hasta ayer. En las pupilas de los actores y actrices ciegos/as de Oroimenak destellaban la ilusión y el compromiso. Para todos vosotros mi admiración y respeto por el trabajo realizado, por haber conseguido mirar con el corazón para capturar un mundo de sensaciones que os permite imaginar la vida de una manera diferente.


10 junio 2008

Frida Kahlo dibujó sus sueños en el Antzoki Zaharra


Nos encontramos inmersos en una sociedad que busca incesantemente la felicidad, y que para lograrlo no duda en camuflar sus problemas, donde además tratamos de perpetuar nuestra amnesia ante la contrariedad. Por este motivo sorprende el arrojo de Karlik Danza Teatro al mostrar en escena las vicisitudes de la infancia en la vida de la pintora mejicana Frida Kahlo. Sorprende el riesgo, porque el espectáculo está concebido para un espectador infantil-adolescente poco acostumbrado a presenciar penalidades, aunque sean fingidas sobre un escenario, y muy habituados a contemplar pasmados historias fáciles, ramplonas, ñoñas, impostadas, que predominan en el panorama contractual del teatro onírico infantil.

La obra nos cuenta acerca de la infatigable lucha, junto a su padre, por sobreponerse a las dificultades que tuvo que afrontar siendo niña. Con la enfermedad siempre presente. La historia está narrada de una manera entrañable, extraordinaria. Con un lenguaje universal. La danza.

Desde el comienzo de la representación los niños/as permanecen ensimismados, en sus butacas. Por momentos, emerge un carrusel de colores y la sombra de la luz tiñe la escena con toda su crudeza, encandilando a pequeños y mayores. Las bailarinas levitan descalzas sobre un espacio escénico recreado por la iluminación y nos dan a conocer que la diversidad y la diferencia, nunca deben ser causa de desigualdad ni de exclusión. Ellas trazan en el aire movimientos vertiginosos que describen los juegos irrealizables para Frida, con amigas que nunca tuvo.

Escenografía, coreografía, vestuario, luces, música, audiovisuales se aglutinan pretendiendo un mismo fin: crear belleza para apoderarse de las entrañas del espectador.

Terminada la función, las emociones se apelotonan, el alma palpita. Acabamos de asistir al reencuentro con la danza como herramienta conciliadora para levantar puentes de integración que ayuden a los más desfavorecidos. ¡Que así sea!

06 junio 2008

Niña Frida en el Antzoki Zaharra








El domingo día 8 se representa una única función a las 18 horas en el Antzoki Zaharra de Donostia, para niños/as mayores de 7 años y para adultos.
Mediante la danza, la compañia Karlik danza nos dará a conocer la infancia de Frida Kahlo. Una historia de superación de la desesperanza.

02 junio 2008

La danza es el quebranto del corazón



En 1996 Ma Li, cuando tan sólo tenía 19 años, perdió su brazo derecho en un accidente de automóvil. Todo auguraba a que se iba a truncar una prometedora carrera como figura de la danza. Sin embargo, Ma Li no se dejo abatir por la desesperanza porque la danza siempre fue su vida. Así que dedicó todo su esfuerzo a superar su dificultad física. Cinco años más tarde en 2001, Ma Li participa en el 5º certamen nacional chino de artes escénicas para personas con discapacidad, ganando el primer premio. Este acontecimiento la animó a regresar con nuevos ímpetus a los escenarios.

En septiembre del 2005 conoce a Zhai Xiaowei que estaba siendo entrenado para ciclista paralímpico. Zhai perdió su pierna con 4 años al caerse desde un tractor. Ma Lí le propuso formar pareja para la obra “Hand in hand” pero Zhai no se sentía capaz de poder lograrlo. Cuando Ma Li le invitó a que la viera bailar “Hand in hand” con un bailarín sin discapacidad física, Zhai quedó cautivado por el desgarrador lenguaje expresivo de su cuerpo y se comprometió a intentarlo.

Después de innumerables avatares, con tesón y esfuerzo habían conseguido ser dos almas perfectamente compenetradas para bailar. Se presentaron con “Hand in hand” al 4º concurso nacional de baile de la CCTV, eran la única pareja con discapacidad entre 7000 competidores y ganaron la medalla de plata.