Serias tan amable de explicar ¿qué cualidades a de tener la gente que trabaja en un departamento de producción teatral?
Bueno. Un productor tiene que tener conocimientos de dirección de empresa, de administración y gestión contable, marketing, organización, economía financiera, etc., etc. Y así podríamos seguir por todas las áreas técnicas también: luz, maquinaria escénica, sonido, maquillaje... Pero no es una persona que tenga que dirigir el espectáculo, porque ya hay una persona, que es el director artístico, que configura esa idea; aunque de alguna manera, sí es la persona que está coordinando todos los elementos que incluye ese proyecto, con la finalidad de conseguir una unión de esfuerzos, o dicho de una manera más prosaica: conseguir que todos los remeros empujen al unísono y de manera continuada en el tiempo.
Este perfil profesional tiene que disponer de conocimientos muy claros sobre el proceso de trabajo de cada una de las áreas artísticas y técnicas que intervienen en este hecho.
Se tiene que tener en cuenta el funcionamiento de los equipos a nivel humano, no nos podemos olvidar que estamos trabajando juntos por conseguir un objetivo común: el estreno de un producto artístico, y esto no sólo es una idea romántica. Al productor lo veo como un técnico más, otro “actor en la sombra”, cuya labor es configurar un proyecto técnico de comienzo a fin o ayudar a configurarlo. Ahora bien, una parte importante de su tarea es trabajar con recursos económicos y humanos. Pero no necesariamente tiene que haber pasado por estudios profundos de economía, derecho, etc.
La iniciativa creativa es del artista y el productor le va a contar a este las posibilidades disponibles para sacar a delante el proyecto y comercializarlo.
Has comentado que la producción tiene varias fases, ¿cuáles suelen ser?
A diferencia de cualquier otro técnico que interviene en un espectáculo en vivo, el productor tiene unos ciclos mucho más largos de trabajo. Empieza desde que se incuba la idea (si es que es llamado desde la primera fase del proyecto), cuando hay bastante trabajo administrativo: hay que convocar a gente, hay que mirar derechos de autor, además de gran cantidad de trámites, etc.
La historia comienza con un director artístico que le va contando la idea al productor. Ésta sería una primera fase de incubación. Todas estas fases pueden tener unos plazos muy diferentes, desde meses hasta años.
Después se pasa a una fase de planificación y, una vez que ya tienes los recursos económicos, humanos y técnicos necesarios, pasas a la fase de realización ejecutiva, donde se pone en marcha todo el proyecto, hasta culminar con el estreno, momento a partir del cual empieza toda la fase de explotación, distribución y venta.
Pero incluso la labor del productor puede continuar con la caída del último telón, entonces empieza su última fase, empaquetar este proyecto y hacerlo pasar a las giras, la hibernación o el cierre indefinido una vez que ha cumplido su ciclo vital. Aquí también tenemos tareas que hacer, entre otras está la reflexión sobre el camino recorrido con el proyecto, trasladar a otra plaza todo el equipo humano y material, o finalizar el proyecto, desconvocar a los equipos, almacenarlo o deshacernos del material utilizado, ultimar la memoria ordenando la documentación, etc.
Como verás es importante tener claras todas las fases que intervienen para poder reconocer la labor que realizan los técnicos de producción.
Con ello intento mostrar y trasmitir la idea de que un productor es mucho más que aquel que busca por toda una ciudad una copa verde, como es la idea tópica. Rosa Mª Peña Tirado (Profesora del CTE-Madrid)
¿En qué consiste la etapa de pre-producción?
- Pre-diseñar.
- Planificar.
- Organizar.
- Presupuestar.
- Financiar.
Entonces ¿por qué utilizar el término preproducción en tono peyorativo para minusvalorar el trabajo que posibilita la consecución de un proyecto? Un productor ejecutivo, proyecta, planifica, presupuesta, supervisa…..
Planificar y presupuestar es algo que hacemos cotidianamente en nuestra vida diaria para llegar a fin de mes, así que esta tarea aún siendo en algunos aspectos algo diferente, tampoco demanda un master a pesar de la actual convulsión económica ¿no? Por lo demás tiene su merito.
En cuanto a la escenografía, la luz, el sonido, la regiduría, utilería…..¿acaso no llega resuelto en aquellos espacios donde no se realizan producciones? Los teatros que se encargan de exhibir las obras ya como producto cultural en fase comercial o acoger los estrenos ajenos, en cualquiera de sus formatos de coproducción, carecen en general de departamentos de producción, lo que existe es el arbitrio de un responsable que ejerce la intermediación entre la compañía y el personal técnico residente para lograr la puesta en escena exigida, pactada y negociada, con la productora de la compañía. En este sentido, por los escenarios circulan dos corrientes de opinión contradictorias, por un lado, un dicho que sostiene que “la única diferencia entre la gente de producción y un sanguinario terrorista, radica en que con el terrorista se puede negociar.” Y por el otro, nos encontramos con actitudes de vocación clerical donde impera la retahíla del “amen” transformada en dogma de fe. Difícil elección.
Los productores teatrales españoles se encuentran integrados desde 1985 en la Asociación Española de Productores Teatrales. ¿De modo que son los que están? Tengo la sensación de que en los teatros de nuevo cuño , no en todos, están embadurnando con el lenguaje y enredando con las palabras, para lograr no sé qué tipo de pedigrí. (La importancia del lenguaje hablado)
En estos teatros donde se contratan espectáculos que se encuentran en gira, los acuerdos previos a las representaciones adoptados entre necesidades requeridas y ofertadas, se contraponen en un singular equilibrio en el que en numerosas ocasiones se diluye la autonomía de quienes hoy se hacen llamar técnicos de producción.
JKAR (Olite-julio 2012)
DPTOS.PRODUCCIÓN EN LOS TEATROS DE TITULARIDAD PÚBLICA