He escuchado rumores maldicientes desclasificando el teatro realizado por “discapacitados” (odio ésta palabra) de cualquier genero teatral. Estoy convencidísimo de que quién piense así se equivoca estrepitosamente. ¿Existe alguien con algún don celestial para otorgar licencias que acrediten qué es teatro y qué no? ¿El teatro ha de convertirse en un gueto de privilegiados con un RH específico? Acogerse a un subjetivo baremo de calidad para excluir al diferente, lastra y empobrece a las artes escénicas, atraca la posibilidad de experimentar con sensaciones nuevas. ¿Cuándo ha tenido el teatro sus códigos de expresión herméticamente cerrados?
El trabajo que estos actores y actrices en ciernes desarrollan, tiene un merito enorme, vaya para ellos mi admiración y reconocimiento, porque muchos de los considerados “normales” seríamos incapaces de hacerlo. Mirad éste fragmento del grupo Ezezagunok. La obra es muy divertida y esto es así porque entre todos ellos consiguen darle vida a un texto desbordante de chispa. Después de verlos ¿no creéis que se merecen aplausos y respeto?
Estoy contigo, el teatro es un lugar con espacio para la libertad.
ResponderEliminarEstoy totalmente de acuerdo. Yo los vi en la obra: "El Kiosko" Y derrochaban , simpatía, desparpajo e intensidad interpretativa que muchos de los llamados "capacitados!", no tenemos. Qué manera de encorsetar a las personas, cuando el teatro es "Libertad" .Es la expresión de nuestro ser más recóndito. ¿Sabían mucho de teatro o de artes escénicas, los jugalares y feriantes medievales que recorrían todos los pueblos y aldeas con sus interpretaciones, donde eran a la vez: productores, directores y actores o actrices y que dejeron su impronta esculpida en los libros de literatura? ¿Dónde están los límites del teatro?
ResponderEliminarJosé Luis Marqués Lledó
Estos chaval@s son unos fenomenos, animo a sus educadores a que sigan explorando por esos caminos.
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